Joyería no presentó facturas de joyas robada

Siempre no presentó facturas de los artículos robados la gerencia de la joyería “Diamonds International”, y sólo se hizo un “avalúo supletorio”, es decir, sólo aportaron de palabra los datos del monto y valor real de las piezas robadas en el asalto, dicen fuentes del interior de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).

Por otra parte, este martes se decide la situación jurídica de uno de los inculpados, que la declaración que dieron ante el Juzgado de Primera Instancia, según todos ellos, trabajan de voceadores de periódicos y sólo vinieron a pasear a Cozumel, dijo la juez Lorena Ayuso Magaña.

Desde el interior de la PGJE dicen que ha sido extraño el actuar de la gerencia de la joyería “Diamonds International”, porque hasta la tarde-noche del viernes pasado, acudieron a interponer la denuncia correspondiente por robo, lo cual para los informantes “ha sido demasiado tiempo, porque en menos de cinco horas después del hurto debían saber la cantidad exacta y el monto real de las pérdidas, además en el entendido de que tienen las facturas a la mano para denunciar legalmente como corresponde este ilícito”, que se cometió el pasado miércoles 5 de octubre, minutos después de las 19 horas.

Según las fuentes, únicamente se efectuó lo que llaman un “avalúo supletorio”, consistente en que el agraviado sólo proporciona verbalmente los datos de la cantidad exacta y el monto de lo que presuntamente le robaron, que en este caso dicen que asciende a poco más de 25 millones de pesos, por la cantidad aproximada de 200 relojes, según los datos proporcionados a las autoridades de la PGJE y que están plasmados en un documento en poder de esta instancia.

Dijeron los informantes que “la tardanza es porque el negocio no contaba con las facturas de los productos en exhibición, y los más seguro es que ni las tenga, lo que da a entender que vendían algo de procedencia dudosa”.

En base a los datos que le hicieron llegar en un primer momento a las autoridades judiciales, “se habían robado los relojes de las marcas reconocidas como Pager Lecaltre, Forum, Audemars, Piguet, Girard Perregbux, Harry Winston, Vacherun Constantin, Piaget, IWC, entre otras marcas, haciendo un monto aproximado de doscientos relojes”, que dividiendo 25 millones de pesos entre los 200 relojes, da un total de 125 mil pesos por cada pieza presuntamente sustraída, aunque podría variar el precio de cada una.


Versión de la juez de Primera Instancia

Lorena Ayuso Magaña, titular de este juzgado, dio a conocer que este martes a las 8:45 de la mañana vence el término constitucional de los inculpados, pero sólo Adrián Díaz Solís de 19 años de edad, defendido por uno de los dos abogados de oficio no quiso acogerse a la ampliación del término constitucional como los demás, por ello a él únicamente se le definirá este martes su situación legal, en tanto que a los otros hasta el viernes a las 8:45 de la mañana.

Comentó que los trece detenidos están acusados por el delito de robo calificado, que “el artículo 145 del código penal refiere que es grave al ser cometido por dos a más personas, en un establecimiento público, y con violencia, y la ley previene que el monto de lo robado excedió más de 300 días de salarios mínimos, la pena de prisión que se les impone es de dos a cuatro años de prisión y de diez a 50 días de multa”.

“Los detenidos no tienen derecho a fianza por ser delito grave, y les complica su situación jurídica que no se hayan encontrado los artículos robados, porque en caso de que este proceso continuara en su resolución definitiva, se les va condenar al pago de todo lo robado que alcanza un valor mayor a los 25 millones de pesos, según el avalúo que se llevaron, y no tengo el dato a la mano de cuantas piezas se llevaron”, mencionó.

Afirmó, “nosotros impartimos la justicia, el ministerio público es el órgano acusador, el puede decir que fueron 25 ó 50 millones de pesos lo robado, pero en el proceso tienen que presentar las pruebas y si la defensa no está de acuerdo va objetar el avalúo”.

Por último señaló que “los trece detenidos se retractaron de lo declarado anteriormente por ellos, en el sentido de que habían aceptado su participación en el asalto y ante el juzgado manifestaron que fueron torturados, que no dijeron eso, que trabajan como voceadores de periódicos en el Distrito Federal, que algunos se conocen, que ninguno participó en el asalto a una tienda de la misma cadena comercial en Puerto Vallarta y que únicamente viajaron a Cozumel en plan de vacaciones de diez días”.