Los tres préstamos de 100 millones de pesos cada uno, adquiridos el primero, el 28 de abril de 2011, a 18 días de que la administración iniciara; el segundo, por otros 100 millones de pesos, el 14 de enero de 2012; y el tercero, también por 100 millones de pesos, el 31 de octubre del 2012; se usaron para comprar desde equipo para defensa y seguridad, hasta herramientas menores, papelería, equipo de comunicaciones y telecomunicaciones, y sobre todo, para obras de urbanización, según documento obtenido a través de la Unidad de Transparencia.
El ayuntamiento de Playa del Carmen, asegura que gastó 147 millones de pesos en obras de urbanización, por lo que allí se fue casi el 50 por ciento de los 300 millones de pesos; pero no se especifica qué obras se realizaron.
En teoría dicho crédito se solicitó para poder hacer frente a posibles contingencias, a eventualidades, y no para inversión en obra pública o para cubrir el gasto corriente con el que según se pretende hacer creer, se compró hasta material de papelería y muebles de oficina.
Según el documento entregado, en equipo de seguridad y defensa se gastaron 61 millones de pesos 876 mil pesos; en obra de edificaciones de uso no habitacional, se fueron otros 19 millones 541 mil pesos; en arrendamiento de maquinaria y otros equipos 18 millones 547 mil pesos; en material eléctrico y electrónico, 12 millones 535 mil pesos.
En el informe proporcionado hay gastos tan bizarros como el destinado a artículos metálicos para la construcción, por un millón 575 mil pesos; y uno más por 8 millones 753 mil pesos, en otros materiales para la construcción.
La suma de los 8 millones 934 mil pesos y los 5 millones 082 mil pesos, gastados en material de limpieza y mantenimiento de equipo, es igual a 14 millones 016 mil pesos, si esta cantidad se divide entre 547 días, que es el periodo de 18 meses durante el cual se fue pidiendo y se dispuso del crédito, esto quiere decir que se gastaron 25 mil 623 pesos diarios, contando sábados, domingos, vacaciones y días festivos en los rubros mencionados…Sin duda las cuentas no checan.
Existen gastos incomprensibles como renta de equipo de transporte por 4 millones 118 mil pesos; sin poderse precisar si se trata de renta de autos o de camiones o de transporte de qué. En arrendamiento de edificios se gastaron 7 millones 523 mil pesos.
Otro rubro poco claro es el de arrendamiento de mobiliario y equipo de administración educativa por 2 millones 755 mil pesos; una cantidad similar se gastó en herramientas menores: 2 millones 598 mil pesos; en equipo de cómputo y tecnologías de la información, un millón 542 mil pesos; en muebles de oficina, 678 mil pesos, y en papelería y consumibles de oficina, 4 millones 209 mil pesos.
Seguramente el detalle de estas cifras cuadradas perfectas de los 300 millones de pesos con cero centavos, adquiridos inicialmente como un crédito a corto plazo, por 180 días, y ahora mandados a deuda pública por 20 años, dejarán ver más claramente el supuesto gasto, pues también se deberá tener una respuesta para saber a dónde se fueron los ingresos propios del ayuntamiento, para tener que echar mano de 300 millones de pesos para realizar desde obra pública hasta para comprar artículos metálicos para la construcción.
No sobra decir, que la administración que adquirió el préstamo de 300 millones de pesos fue compartida entre Filiberto Martínez Méndez y Rafael Kantún Ávila, el primero asumió el cargo el 10 de abril de 2011, y lo dejó el 5 de abril de 2013 para buscar la diputación por el Distrito V, la cual ganó en julio pasado; en tanto, Kantún Ávila tomó el mando del ayuntamiento de Solidaridad el 5 de abril y lo entregará hoy 30 de septiembre a las 10 de la mañana. (Fabiola CortésNoticaribeNews)