Ernesto Arreola cayó entre la acera y el asfalto de la avenida Sunyaxchen, quedando una parte de su cuerpo debajo de su camioneta tipo Tacoma, la cual estaba estacionada frente a la estética Yaret.
De acuerdo a versiones preliminares el ahora occiso trabajaba en una obra de la Universidad del Caribe y se trasladaba con un colega a la estética, a cortarse el cabello, pero se detuvieron en un OXXO a comprar unos cigarros, y es en el momento en el que fumaban cuando fue sorprendido por el homicida: al llegar al lugar de los hechos, donde encienden ellos un cigarrillo, se ponen a fumar afuera, en esos momentos llega el presunto responsable y de forma rápida efectúa unos disparos sobre él, dijo en el lugar de los hechos el director general de la Policía Judicial del Estado (PJE), Arturo Olivares Mendiola.
El acompañante del fallecido señaló que sólo alcanzó a ver a un joven de entre 25 a 30 años, quien vestía una bermuda de color verde, de mezclilla; pero no pudo ver más porque se tiró al suelo en cuanto escuchó los disparos.
De acuerdo a testigos, el homicida se dio a la fuga en un automóvil tipo Chevy, al parecer de color gris, el cual era pilotado por otro sujeto que lo esperaba cerca.
El funcionario judicial detalló que los peritos recogieron ocho casquillos calibre 9 milímetros y una ojiva, como evidencia de los disparos.
El cuerpo del occiso presentó entre 4 y 6 disparos, y diversos orificios de entrada y salida entre la cabeza y el pecho.
De acuerdo a la Procuraduría de Quintana Roo se trata del ejecutado número 35 de este año. (NoticaribeNews)